SUS
DOCE VIRTUDES
La gravité, le silence, l'humilité,
la prudence, la sagesse,
la patience,
la retenue, la douceur, le
zèle,
la vigilance, la piété et la générosité.
Joseph Gonlieu
(ou Goullieux),
en religion le frère Agathon,
Il est l'auteur d'un ouvrage de pédagogie pratique:
Les Douze Vertus d'un bon maître,
publié à Melun en 1785, dans lequel il ramène aux douze vertus suivantes les
qualités indispensables à un instituteur.
1. La gravedad del maestro
Su
gravedad, la seria ley de la gravedad formulada por Newton en 1687 en
su Philosophiae Naturalis Principia
Mathematica, aplicada a su misión de maestro: proporcional a su ilusión por
su magisterio e inversamente proporcional al cuadrado de la gratitud que espera
de su ejercicio.
Su
gravedad, la del águila que planea en las alturas y domina un anchísimo
horizonte. Es su gran
riqueza, el dilatado horizonte humano y divino.
Su
gravedad, la del cortesano del siglo XVII francés, que muestra en su
rostro más alegría que tristeza, que marcha pausada y gravemente, que no
levanta la voz, que no se gira de pronto atolondrado…
Su
gravedad, la que le da peso a su cerebro de filósofo, elegancia a su
lenguaje rico, popular y literario, y cordura a su corazón siempre en flor, que
perfuman pequeños detalles de finura y grandes hechos a largo plazo.
Su
gravedad, la metafórica alfombra que ensuela de seguridad y de sosiego el espacio por dónde pasa.
Su
gravedad, la bíblica de la carta a Tito: “Explica las cosas que sabes, anima y reprende con autoridad -cum omni
imperio-; que nadie te menosprecie”. (Tit 2,15)
Ramiro Duque de Aza
Maestro.
Profesor de Teoría del conocimiento
Bachillerato Internacional
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