Buscar este blog

84 Eclesiástico (III)






(III) FICHA moral DE 

JESÚS BEN SIRÁ 




En la caracterología de mi profesor Paul Grieger, Jesús Ben Sirá es un EAS para nEAS, es decir, un apasionado-para-flemático. Quede el apunte para mejor ocasión. Sin perder de vista esto que sería por nacimiento, cosa que le marca, intentemos trazar su ficha moral. Potenciado por su carácter de raíz, ha viajado por el mundo y ha tomado el pulso a diversas culturas y civilizaciones. Está orgulloso de ser judío. Se felicita por ello. Su aspiración es serlo más a fondo.

Tiene claro que Israel se juega mucho en el enfrentamiento de su tiempo con un Helenismo fascinante. A él también le afecta el juego.

Las virtudes de la raza judía son sus virtudes: certeza de su superioridad, tenacidad, dominio de sí, liberalidad, legalismo... Así nos las pinta el libro de los Proverbios. En él está descrito el ideal del sabio. Y nos parece sino que su autor tiene delante a nuestro Ben Sirá.

¿Qué es y qué piensa y quiere Ben Sirá?

Que la Ley del pueblo judío es superior, que eleva al hombre y por eso su pueblo y sus hombres son superiores.
El que guarda la Ley se guarda a sí mismo. (32,24)
El que odia la Ley no llega a sabio. (33,2)

Ben Sirá detesta la mentira, la tiene por infame, para él es peor que el robo:
La mentira es una infamia para el hombre, no se cae de la boca de los necios, mejor es el ladrón que el embustero, los dos heredarán la perdición. (20,24-26)

Busca el pensar debidamente, con rectitud, por lo derecho y mantener lo pensado con los hechos:
Sé firme en tu pensar y coherente con lo que dices. (5,10)

Recomienda a sus discípulos que permanezcan dueños de sí:
En todo, vela sobre ti mismo; esto también es observar lo mandado. (32,23)

Es sobrio, moderado, piensa en las consecuencias.
Con poco se contenta el hombre bien educado. (31,19)
No te hagas el valiente con el vino. (31,25)

Sabe callar, escucha, no se precipita.
El sabio calla hasta el momento oportuno. (20,7)
¿Has oído algo? Que muera dentro de ti. (19,10)
Presto para escuchar y calmoso para responder. (5,11)

Ben Sirá es un sabio y por ello, hombre profundo y, a la vez, una psicología de matices. Nadie anterior a él en la Biblia había analizado de modo tan penetrante los finos movimientos del corazón: la envidia y la avaricia (14, 3-10); el orgullo (10, 7-18; 3,26-29; 7,4-5); el rencor (10,6; 27,30; 38,7); el respeto humano (4,26-27; 20,22).

En su vuelo moral se nos adelanta al perdón cristiano.
Perdona la ofensa a tu prójimo, y se te perdonarán los pecados cuando lo pidas. ¿cómo puede el hombre guardar rencor a otro y pedir a salud a Dios? (28,2-3)

Profesando un ideal moral, del que se considera rico heredero, no deja de mantenerse en el equilibrio que prefiere al heroísmo. Frente al Helenismo le vemos elevarse y levantar sus defensas propias.


CARLOS URDIALES RECIO
Maestro. Ciencias religiosas. Univ. Lateranensis 
Ancien élève de Évode Beaucamp
y de Francesco Spadafora

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Envíanos tus comentarios

117 AFDA

        ÍNDICE  PRINCIPAL                              ____________________________________   Pregón:  Educación y expertos. Libertad       ...